Si hiciste “Veganuary”, ¿qué tal si ser vegan todo el año?

Después de Veganuary, ¿qué sigue? Sigue leyendo.

Si acabas de terminar Veganuary, ¡felicitaciones! es un reto de un mes para seguir una dieta basada en plantas, y te preguntas si puedes continuar. No tienes por qué sentirte mal; intenta recordar por qué te embarcaste en este viaje y utiliza esa motivación para mantener el impulso. Es un nuevo año, es un nuevo tú.

Para la mayoría de la gente, la decisión de hacerse vegano entra en una de estas tres categorías: minimizar el sufrimiento de los animales, mejorar su salud y forma física o proteger el planeta. Pero estas razones no se excluyen mutuamente y su incentivo inicial puede haber sido una combinación de las tres. A menudo, las personas se dan cuenta de que quizá empezaron a pasarse al veganismo por una razón, pero después, al conocer mejor los demás beneficios, acaban sintiéndose más identificadas con otra. El hecho es que todas son buenas razones.

Por los animales

Sin lugar a dudas, los animales en las granjas son los más maltratados del planeta, sacrificados por miles de millones para satisfacer el insaciable deseo mundial de carne, lácteos, pescado y huevos. La crueldad y el sufrimiento son endémicos en todos los casos, ya se trate de animales alimentados con hierba, criados en libertad, ecológicos o criados de forma intensiva.

Aunque las leyes de bienestar animal de muchos países, incluido el Reino Unido, protegen a los animales del hambre, la sed, la desnutrición, el dolor, las lesiones, las enfermedades, la incomodidad, el miedo y la angustia, así como de la libertad de expresar sus comportamientos naturales, la realidad es que ninguna de estas libertades puede cumplirse adecuadamente en los sistemas de cría diseñados para priorizar los beneficios sobre el bienestar.

Tomemos como ejemplo el pollo, la carne favorita de los británicos. Estas aves se crían selectivamente para que ganen peso rápidamente en el menor tiempo posible. Crecen de forma tan anormal que sus cuerpos no pueden soportar el esfuerzo y, como consecuencia, sufren toda una serie de dolorosas afecciones, como defectos cardíacos, cojera, rotura de patas, enfermedades musculares verdes y fallos orgánicos.

Para tu salud

Existe una gran cantidad de investigaciones científicas que muestran que las personas veganas tienen un riesgo reducido de desarrollar enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2, demencia y algunos cánceres, además de reducir el colesterol y aumentar los niveles de energía. Eric Adams, un destacado político estadounidense y ex oficial de policía, que actualmente se desempeña como el alcalde de Nueva York, es un notable defensor de volverse veganx para su salud, afirmando que una dieta basada en plantas no sólo revirtió su diabetes, sino también restauró su visión.

Si bien es posible ser un vegano poco saludable, los estudios han demostrado que los veganos generalmente comen mejor que otros grupos y tienen bacterias intestinales más amigables, lo que puede tener un buen impacto en la salud. Las dietas veganas equilibradas y de alimentos integrales están repletas de proteínas vegetales, fibra, carbohidratos complejos, minerales, grasas buenas y vitaminas; incluyendo B12 cuando se suplementa suficientemente.

Los extractos de levadura, las leches vegetales, los yogures, los postres, los cereales para el desayuno y las pastas para untar fortificados con B12 son buenas fuentes de vitaminas, pero complementarlos garantiza que obtenga al menos 50 microgramos por día, lo cual es de vital importancia.

Es un error pensar que la carne y los productos lácteos contienen B12 de forma natural, pero no es así. Los animales de granja también reciben un suplemento de B12, que los consumidores absorben de segunda mano. Pero lo que la industria ganadera no nos informa es que los productos cárnicos ahora contienen sustancialmente menos B12 que en los años 1990. Además, la absorción de B12 disminuye con la edad. Entonces, independientemente de la dieta, la mayoría de las personas se benefician al tomar un suplemento de B12, especialmente a medida que envejecen.

Para nuestro planeta

En cuanto al planeta, los principales expertos mundiales coinciden en que nuestros hábitos alimentarios son una de las principales causas del colapso climático. La cría de animales, incluido el cultivo de piensos para animales de granja, contribuye con una enorme quinta parte de todas las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero y está alimentando activamente la crisis climática, impulsando la deforestación; la contaminación del aire; desertificación; la escasez de agua; y pérdida de vida silvestre. El impacto de lo que comemos es de gran alcance y si no logramos frenar la progresión del caos climático, las temperaturas globales pronto superarán los 1,5°C por encima de los niveles preindustriales y la vida tal como la conocemos tal vez nunca vuelva a ser la misma.

En este momento, vamos camino de un calentamiento de alrededor de 2,5 °C para finales de siglo, cuyas consecuencias mortales ya estamos experimentando: olas de calor vertiginosas, incendios forestales sin precedentes, inundaciones desastrosas y extinción masiva de vida silvestre.

Investigadores de la Universidad de Oxford han destacado el importante papel que desempeña la comida en nuestro plato a la hora de decidir el destino de la humanidad. Se afirma audazmente que “volverse vegan es probablemente la acción más importante que un individuo puede tomar para reducir su impacto en el planeta”, mientras que descubrieron que al cambiar a una dieta vegana, un individuo puede reducir sus emisiones de calentamiento climático relacionadas con los alimentos en hasta al 75 por ciento y su impacto en la destrucción de la vida silvestre en un 66 por ciento.

En esta web contamos con muchos recursos para que sigas en esta senda del veganismo por los animales, tu salud, el planeta o porque estás contra la opresión de seres vivos.

Por Leg Rigby, traducido de su original publicado en Plant-Based