¡Ayuda, soy vegana, voy a volar por horas y quiero comer!

Soy vegana y obviamente al volar no quiero padecer de hambre, pero ¿quién sí? Como vegans al pensar en las comidas durante vuelos, sobre todo en los que son de larga duración, puede ser algo complicado, incluso una pesadilla. Bueno, al menos eso es lo que la mayoría cree, pero en esta ocasión les compartiré mi reciente experiencia en vuelos largos, algunos con escalas y otros directos.

La aventura

Hace unos meses tuve la oportunidad de asistir a la International Animal Rights Conference en Luxemburgo y cómo volé desde la Ciudad de México, inmediatamente me puse en contacto con la aerolínea para asegurarme que me incluyeran alimento basado en plantas en mis vuelos (tuve que hacer escala en Ámsterdam).

Para mi sorpresa fue muy sencillo. Simplemente tuve que entrar a la página de la aerolínea, introducir mis datos (nombre y número de reserva) y en el menú de opciones me fui a la sección de “alimentos” y ahí elegí comida “vegana” (hay quienes la llaman basada en plantas o vegetariana estricta). Y pude hacer esto para los dos vuelos.

Una vez estando en Europa realicé un viaje a Egipto, volé con una aerolínea italiana y la forma de pedir el alimento apto para vegans fue exactamente el mismo. Y como punto extra, el snack que le dieron a todas las personas que viajaban era apto para vegans y traía una leyenda que lo indicaba 😉

Para el regreso de Europa a América del Norte volé con una aerolínea mexicana y su sistema es distinto. Debes hablar con al menos 48 horas de anticipación y pedir el alimento “especial”.

Las comidas en los aviones no son un manjar, sin embargo puedo decir que quedé satisfecha, por ejemplo, una comida incluía: fruta, panini de verduras, ensalada de cuscús, yogurt vegetal y bebida. Digo, no está mal para no morir de hambre en un vuelo de más de ocho horas.

Desearía que los alimentos basados en plantas no fueran una petición especial, sino lo común, de por sí volar conlleva un gran impacto en la huella de CO2.

Sabías que existen aerolíneas que transportan animales para que sean explotados en los laboratorios?

La mayoría son primates pero también hay otras especies. Aquí puedes encontrar la lista de PETA sobre las aerolíneas que transportan y no transportan primates para experimentación en laboratorios. Lufthansa extendió la protección en este tema para perrhijes y gathijes.

Sin embargo, estas y estos animales no son los únicos que las aerolíneas ayudan a transportar; el comercio de animales silvestres, los zoológicos y las carreras de caballos se benefician del apoyo de la industria de la aviación. También los animales explotados por su carne son transportados frecuentemente por vía aérea.

Las aerolíneas y deportaciones humanas

Y desafortunadamente la complicidad de la industria de la aviación en prácticas injustas no se limita a ellas y ellos; aerolíneas como British Airways (BA), EasyJet y Virgin Airlines han sido parte del sistema de deportación del Ministerio del Interior del Reino Unido. En 2018 se reveló que hasta 160 personas de la Generación Windrush podrían haber sido deportadas injustamente a través de estas aerolíneas.

Tras el escándalo Windrush, Virgin Airlines declaró que ya no ayudaría a deportar a personas consideradas inmigrantes ilegales. De igual manera, las aerolíneas y los aeropuertos podrían optar por dejar de transportar animales con destino a laboratorios, mataderos u otras formas de cautiverio y explotación.

De hecho, en 2005, BA impuso una prohibición general de transportar animales para laboratorios, asimismo United Airlines en 2013, China Southern Airlines en 2014 y Qatar Airways en 2021. La restricción. o incluye otros animales como para zoológicos y carreras.

Estas cuatro aerolíneas enfrentan actualmente acciones legales de la Asociación Nacional de Investigación Biomédica de Estados Unidos por obstaculizar “investigaciones médicas vitales y necesarias”.

¿Y ahora, qué sigue?

Definitivamente es importante seguir luchando contra el especismo. Por ello, investigar, denunciar y exigir cambios resulta muy importante. Lamentablemente vivimos en un mundo capitalista pero cada unx de nosotrxs podemos hacer lo que nos corresponde y nos es posible y así iremos construyendo el cambio.