14 de febrero: el amor no distingue especies

La celebración del 14 de febrero como día del amor y la amistad es una fecha que lentamente ha tomado protagonismo en el calendario. El día de San Valentín está vinculado a la idea del amor romántico, entre parejas, anclado a un modelo monógamo y heterosexual, patrones de conducta que hablan de una idea conservadora entre dos personas. Lentamente, los sentimientos se liberan a diferentes expresiones.

Amor y amistad entre las personas

La celebración bautizada como “el día de los enamorados”, ha ido mutando en su idea de acuerdo a su actualización en el tiempo. En esa línea, la idea del amor romántico, con escenas del estilo de la película “Lo que el viento se llevó”, o “Titanic”, han quedado atrás, con un modelo de pareja heterosexual, anclado a una mujer conquistada por un super macho alfa, es un estereotipo que hoy está, por lo menos, desactualizado.

Antes, este día estaba dedicado a los chocolates, las flores, y todas esas muestras de amor platónico dignas de la Edad Media, las cuales se transforman en serenatas y mariachis cuando el alcohol ha hecho su trabajo en el corazón de aquellos antiguos románticos.

A su vez, el molde de una pareja heterosexual, jurándose amor para siempre (hasta que la muerte los separe), incluso con mantener la virginidad hasta el matrimonio, uff ¡qué horror! Esas prácticas ya se alejan de lo que hoy conocemos como “un amor real”. En la actualidad, las expresiones de amor están condicionadas al momento y la libertad de elegir.

Si bien es cierto, los modelos hegemónicos siguen insistiendo en un formato tradicional, tal como lo vimos el año pasado con la explotación de la película Barbie como un modelo capitalista de las relaciones de pareja, lo cual también es indirectamente puesto en tela de análisis por el propio guión de la película. ¿Realmente un Ken nos salvará la vida? No sé.

Más allá de estos productos comerciales, en la calle las colectivas y los movimientos sociales abogan por un amor libre entre dos personas, independiente de su condición sexual, libres en su capacidad de estar juntas, ya sea en relaciones abiertas, cerradas, efímeras o para siempre, que se puedan casar dos personas sólo porque se aman, o que puedan compartir un momento de sentimientos mutuos sin necesidad de una relación formal, solamente por seguirle la corriente al amor, aunque sea por un ratito, con respeto.

Amor a los animales y al exterior

Una idea de amor hacia los animales no debe ser entendida como un amor filial de las personas hacia los seres vivos del reino animal. Esta concepción de afecto puede abrirse a seres vivos del reino vegetal e incluso a una cosmovisión de nuestra existencia, anclada al universo como un todo, abriéndose a posturas filosóficas que nos permitan una cosmovisión de la vida. En ellas, los animales coexisten con nosotres, y no para nosotres.

Un debate importante, es la diferenciación que muchas personas hacen entre los animales de compañía (mascotas)  y los animales de consumo. ¿Por qué un cerdo debe morir faenado para ser comido por seres humanos, que veneran a perros y gatos como un miembro de la familia?

Desde esa mirada, podemos ampliar la reflexión hacia los diferentes productos animales que involucran un modelo de explotación para satisfacer nuestras necesidades. A la hora de observar la industria de la carne y del cuero, al entender los daños sobre los animales de testeo en la industria dermatológica, o al analizar las granjas de cultivo para animales de ganadería y consumo avícola, son crueldades para beneficio de una mirada antropocéntrica que debe aprender a empatizar y respetar otras formas de vida en el planeta.

En ello, el cuidado del medio ambiente es una importante manifestación de amor colectivo. Desde el uso racional de los recursos naturales, hasta la eliminación del plástico y los productos desechables en nuestros hábitos domésticos. Cuidar la tierra, el aire y el agua, son maneras de establecer un vínculo con nuestro ecosistema, y también un faro de luz que nos ilumine a entender el grave avance de la industrialización capitalista en el planeta.

El amor individual, “love yourself”

Para terminar, no por eso menos importante, es necesario considerar una cuota de amor propio. No tenemos que relacionar esto al hedonismo, al narcisismo, ni a una fiebre por tener fama, likes, o una visión ciega sobre el éxito. Amor propio significa estar bien en nuestro interior, y ahí es clave el cuidado individual, cultivar cierta “inner peace”.  

Este sentimiento benigno se expresa en dos direcciones. Hacia afuera, guarda relación con la manera que tenemos de relacionarnos con nuestro entorno, nuestra comunidad, nuestros seres queridos, y desde ahí formar un núcleo de personas, una familia y un grupo social. Hacia adentro, significa lo que consumimos a través de nuestros sentidos en el paso de nuestros días, el arte, la comida, el uso del tiempo y de la palabra, como modos de expresión que nos van completando como personas al conectar con lo de afuera.

En ese punto, el autocuidado es clave, saber sentirnos bien, tener salud mental, privilegiar nuestro bienestar por sobre cualquier exigencia social. A la hora de comer, de estimularnos, de relacionarnos y de arriesgarnos, tener conciencia de nuestro ser y consciencia de nuestro entorno, para con ello alcanzar una expresión del sentimiento amor hacia una cosmovisión que pueda conectarnos con el mundo entero y darnos una vida en paz.

Si quieres leer y saber más sobre el amor vegan y entre personas veganas da click aquí